El camino al éxito está colmado de buenas decisiones, mientras que el fracaso de malas. Por más obvio que parezca, debemos tener en cuenta que la toma de decisiones en las PyMEs es fundamental para alcanzar los resultados esperados.
Considerando el 2020 y la posible crisis que nos haya traído, nuestra capacidad de elegir las mejores opciones será un gran salvavidas. Básicamente, todo el crecimiento y desarrollo de nuestro negocio está íntimamente relacionado por nuestras oportunidades bien aprovechadas y con nuestras negativas bien optadas.
En este 2021 la prioridad de la mayoría de las empresas será la recuperación económica. Para esto, debemos entender nuestras necesidades, planear estrategias nuevas y entender que las circunstancias son muy influyentes.
Entonces, ¿qué es lo que debemos considerar a la hora de tomar decisiones? En primer lugar, debemos contar con todos los datos de la empresa. Solo teniendo la mayor cantidad de información posible será posible conocer la realidad de nuestra situación. Debemos tener en claro nuestros recursos, nuestro capital, nuestros resultados, etc.
Una buena acción para tomar buenas decisiones es planear de antemano objetivos que estén en sintonía con mis estrategias. Luego, debemos gestionar, es decir, tratar de combinar de la mejor forma los recursos para alcanzar los objetivos, maximizando cada uno de ellos para obtener mejores resultados.
Hay que tener en cuenta que una buena gestión empresarial va de la mano de la correcta toma de decisiones.
Lo siguiente será medir y controlar. Hacer un seguimiento a las decisiones tomadas y analizar su comportamiento para saber si efectivamente están dando resultados o si es necesario realizar ajustes para mejorar estos últimos.
También, debemos considerar que hay algunos elementos que intervienen en la toma de decisiones como, por ejemplo, la revisión de las ventas, comparando periodos anteriores y conociendo cuándo hay más demanda, la salud del flujo de caja y el seguimiento de las cobranzas.
Estos elementos nos establecen claridad y nos esclarecen las opciones. Descartar lo que no sea de mi interés, acelerar los cobros, automatizar procesos y ser más amigos de los datos serán mis aliados a la hora de tomar decisiones.